BeschreibungEnclavada entre Capdepera y Artà, rodeada de suaves colinas y vegetación mediterránea, se encuentra esta encantadora casa de piedra mallorquina: un lugar donde historia, tranquilidad y naturaleza se funden en perfecta armonía.
La propiedad, que data de 1890, se ha conservado con esmero y mantiene su carácter auténtico sin renunciar a las comodidades modernas. Ubicada en una generosa parcela de aproximadamente 17.733 m², ofrece privacidad, vistas panorámicas y el encanto de un jardín maduro donde olivos, higueras y algarrobos brindan sombra.
La finca se distribuye en dos plantas con una superficie habitable de aproximadamente 236 m². En la planta baja, un acogedor salón con chimenea da la bienvenida, seguido de una luminosa sala de estar con estufa de leña y una encantadora cocina rústica con comedor. Varias terrazas cubiertas crean una transición fluida entre los espacios interiores y exteriores, perfecta para disfrutar del estilo de vida mediterráneo al aire libre.
En la planta superior encontrará una encantadora galería, un espacioso dormitorio principal con acceso a una gran terraza en la azotea que ofrece vistas panorámicas de la finca, otro dormitorio y un baño.
La propiedad también incluye varias dependencias, una gran piscina, un pozo privado para el abastecimiento independiente de agua y un amplio espacio para diversos usos.
Esta finca es un verdadero paraíso, ideal para los amantes de la naturaleza que buscan autenticidad sin renunciar a la cercanía de las playas, restaurantes y campos de golf de la costa este.
Ausstattung- Aire acondicionado (sistema split en la planta superior)
- Dos chimeneas (una abierta y otra de leña)
- Cocina rústica equipada con comedor
- Varias terrazas cubiertas y una amplia azotea
- Fuente y pozo privado
- Conexión a la red eléctrica pública
- Jardín mediterráneo bien cuidado con árboles maduros
- Varias dependencias
- Suelos de baldosas
- Vistas panorámicas despejadas y tranquilidad
LagebeschreibungLa finca goza de una ubicación idílica entre Capdepera y Artà, dos de los pueblos más bonitos del noreste de Mallorca.
Capdepera es conocida por su encanto medieval, sus calles estrechas y el impresionante castillo que domina el paisaje urbano. Muy cerca se encuentra Cala Ratjada, un animado pueblo portuario con boutiques, restaurantes y un puerto deportivo.
El pueblo artístico de Artà, con su encantador casco antiguo repleto de cafés, mercados y galerías, está a tan solo diez minutos en coche.
Las playas de Cala Mesquida, Cala Agulla y Canyamel son fácilmente accesibles, ideales para quienes desean combinar la auténtica vida rural con la proximidad al mar.
SonstigesUn auténtico rincón de Mallorca: rústico, tranquilo y con mucha personalidad. Perfecto para quienes desean combinar el encanto de épocas pasadas con las comodidades actuales.